ARTESANIA AKELARRE ARTISAUTZA: MAKING OFF. MANDALA LAURA PASO A PASO.

Lleva tiempo rondándome la idea de colocar en el Blog un Making off de cómo se realizan los mandalas ya que es muy grato su desarrollo e intuyo que a alguien le vendrá bien para lanzarse a pintarlos desde cero.

Así que en esta ocasión fui sacando fotos con el móvil (perdón por la calidad de las fotos) para ver la evolución del mandala en cuestión. Es increible como va cobrando vida a partir de una base.

Empecemos.

DIBUJAMOS LA BASE.

Lo primerísimo de todo es buscar el centro del lienzo - hoja en la que vayais a dibujar el mandala.

Para ello, trazamos unas líneas con una regla o algo recto que abarque las esquinas del lienzo, esto es, trazamos una X cruzando extremos.

Tenemos ya marcado el punto de comienzo, esto nos dará coherencia al mandala. A partir de aquí, podemos confeccionarlo de muchas maneras - motivos.

En este caso, empecé dibujando un círculo en el centro, y detallé la semilla de la vida.

y proseguí hasta realizar la flor de la vida.

Una vez hecho, con el compás tracé varios círculos concéntricos más grandes en los qué, aprobechando las lineas sacadas, fuí desarrollando los pétalos.

Una vez hecho el diseño, empezamos a pintar.

PINTAMOS LA BASE CON COLOR.

Le vamos dando capas de color, desde fuera hacia dentro, o al revés. Depende si lo dejamos al presente, o si por el contrario trabajamos con fin, obraremos de la siguiente manera:

Si queremos Sakar las Emociones. De dentro hacia fuera.
Si queremos introspección: De fuera hacia dentro.

DETALLAMOS EL MANDALA.

Tras tener la base, hay que empezar a definir el Mandala. comenzamos a personalizarlo, dándole los diferentes matices. En este caso, decidí marcar diferentes azules en la flor de la vida, y para los semicírculos los fui rellenando con puntos de diferentes tonalidades.

Podemos ver los puntos de la base de la flor, y los semicírculos completos. Le dan efecto de profundidad.

Una vez "terminado" el centro, lo definí con una línea negra para resaltarlo.

Ahora tocaba seguir con el círculo más proximal y los pétalos.

En este caso, fuí rellenándolo con puntos de diferentes tamaños y colores, según venía la intuición o salía el color al mezclar. Poco a poco va tomando forma.
Al último tramo de pétalos, le incorporé pintura más clara en el reborde interno para resaltar el mandala y darle profundidad al fondo.

En este punto, lo que hice fue matizar las líneas con una tonalidad más clara, delimitando el círculo central y los pétalos del medio. Además, añadí pintura color cobre perlada, que brilla un montón en en fondo de la flor de la vida.

El cambio del mandala es espectacular simplemente sumándo las lineas.

Para darle más coherencia, les dí un borde más oscuro al verde del fondo de los pétalos y me dispuse a bordearlos con unos puntos amarillos.

Al centro también se le añadió unos puntos con pintura azul perlada.

Para esta ocasión, utilicé un verde vivo claro para matizar los pétalos del centro, que los resalta un montón.

Para darle forma 3D, he usado pintura para ventanas, que queda en relieve, aunque no se cuál es su nombre comercial. Se que otros artistas utilizan acrílico para relieve que trae un dosificar muy cómodo para estos trazos, pero carezco de ello y la improvisación ha tenido un efecto espectacular.

Con ello, se le ha adornado al mandala tanto el fondo como ciertas áreas que quedaban "desnudas".

Los puntos blancos del centro son fluorescentes, esto es, en la oscuridad, brillan.

Una vez aquí, hice lo mismo para el fondo del medio, además añadí pintura dorada en los pétalos exteriores, en unos en forma de fondo y en otros como puntos.

Se rellenan la misma manera los "huecos" que veais.

Normalmente el fondo del mandala ya estaría pintado pero esta vez, lo dejé hasta este momento y le hice una "camita" con un tono naranja tierra con un poco de brillo. Le envuelve y lo suaviza este tono cálido.